11. Una carrera por la libertad.
Midgar [ν]-εγλ 0002/08/09
Después de una larga noche de copas con sus colegas Turcos en un bar de los suburbios del Sector 5, el jugador se despierta, encontrándose solo. Se tropieza al salir y hace su camino a través del pueblo. Más tarde, llega a una casa de tejas rojas rodeada de flores. Una joven sale de la casa, pero escapa cuando ve su uniforme de Turco y termina chocando con dos miembros AVALANCHA.
El jugador los derrota y sugiere a la chica que vaya a casa. Ella se sorprendió al darse cuenta que el Turco no tiene idea de quién es. Más miembros de AVALANCHA atacaban y los dos escaparon por los barrios bajos. La muchacha sugiere que se dirijan a la zona residencial del sector, ya que hay muchos lugares para esconderse. Luchando contra los enemigos que los perseguían, el jugador Turco manda a la niña a correr adelante y encontrar un escondite.
Después de la batalla, el jugador llega a la zona residencial y comienza a buscar a la chica. El jugador encuentra escondida la joven en una de las chozas abandonadas, e insiste en que permanecen allí por un tiempo. Ella se presenta como Aeris. Después de varias horas, AVALANCHA sigue patrullando la zona. El Turco pregunta a Aeris por qué había decidido salir de su casa esa noche, a lo que ella responde que el planeta la estaba llamando, diciéndole que se vaya en un viaje para ver el mundo más allá de Midgar. De repente, ella entra en pánico, al darse cuenta de que ha perdido su Materia especial en alguna parte. El jugador Turco dice Aeris que se quede donde está, que la va a encontrar y rápidamente la descubre en el camino exterior. De regreso a la choza, el jugador es seguido por Sears, y es atacado. Golpeando el jugador, lo deja inconsciente. Sears secuestra a Aeris.
Mientras tanto, el presidente Shinra ordena a Verdot impedir que AVALANCHA consiga a Aeris, pues ella es alguien a quien la empresa ha estado buscando durante años. El Vicepresidente Rufus sugiere que envíe efectivos militares para capturarla. Pero el presidente Shinra, responde que tienen que tomar precauciones para asegurar que los lleva a la Tierra Prometida. Rufus contesta que el tiempo perdido en estas precauciones pesa más que el resultado final.
Sears lleva a Aeris a la iglesia del Sector 5 donde Elfe y Fuhito esperan. Fuhito y Elfe explican que la razón por la que AVALANCHA ha estado buscándola es porque (como la última superviviente Cetra) quieren protegerla de Shinra, y aprender la ubicación de la tierra prometida, para que puedan protegerla de Shinra también.
Aeris dice que ella no tiene idea de dónde está la tierra prometida, pero que puede oír una voz extraña y familiar que viene desde dentro Elfe. Fuhito rápidamente sugiere que debe ser un error ya que nunca la habían visto antes, aunque añade que Elfe no tiene memoria de su vida antes de unirse a AVALANCHA. Aeris dice que es otra cosa; que su voz sufre.
Mientras la conversación tiene lugar, el jugador Turco es capaz de encontrar la iglesia y sube a través del agujero en el techo sobre las vigas. Al observar la conversación, Sears lo ve y da la alarma. Corre a luchar contra el en el techo. Durante la batalla, aterrizan en el macizo de flores. El jugador está lesionado y vuelve para luchar Fuhito y Sears. Durante la lucha, Aeris les dice que no pisen las flores, hasta que finalmente ella se interpone entre ellos y el Turco.
Fuhito insiste en que maten al jugador ya que es parte de Shinra, pero Aeris no se mueve. De repente, Elfe se desploma y Sears y Fuhito la ayudan en la iglesia, diciendo a Aeris que Elfe tiene una enfermedad que sólo la Tierra Prometida puede curar. Aeris dice al jugador que ha decidido no ir en su viaje, ya que no sería más que dejar ganar a AVALANCHA. Estos, huyen de Shinra.
Fuera, se reúne Tseng y el jugador dice en secreto a Aeris que corra a casa. El jugador detiene a Tseng y dice que están están fuera de servicio. Tseng dice que él no quería hacer daño a Aeris. Iba a persuadirla pacíficamente para venir con Shinra. Dice que la razón por la cual no la ha capturado antes es porque sin su plena cooperación, no les llevaría a la Tierra Prometida y por lo tanto a la gran felicidad que anhela la gente del planeta.
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